Reflexión de trabajo personal

Verdad, El Juego de los Espejos, Conciencia y Justicia

Desde hace algún tiempo, vengo pensando en la necesidad de escribir un mensaje acerca de este tema, porque los botes de las personas no van vacíos y me interesa que las personas nos unifiquemos y superemos en conjunto para que la humanidad eleve su vibración.

Es muy cómodo seguir observando cómo las personas, guías, líderes o maestros de diversas corrientes místicas sigan dando vueltas en torno a los conflictos, juicios, descalificaciones, amenazas, imposiciones de la verdad o adoctrinamientos, los cuales no aportan una solución.

Observa el resultado de lo que puede pasar cuando se hacen o exigen transformaciones a los demás en el siguiente Koan.

LA PALOMA REAL

(El canto del pájaro de Anthony de Mello)

“Nasruddin llegó a ser primer ministro del rey. En cierta ocasión, mientras deambulaba por el palacio, vio por primera vez en su vida un halcón real.

Hasta entonces, Nasruddin jamás había visto semejante clase de paloma. De modo que tomó unas tijeras y cortó con ellas las garras, las alas y el pico del halcón.

«Ahora pareces un pájaro como es debido», dijo. «Tu cuidador te ha tenido muy descuidado».

¡Ay de las gentes religiosas que no conocen más mundo que aquel en el que viven y no tienen nada que aprender de las personas con las que hablan!”.

El objetivo de este mensaje es mostrar un punto de vista, el cual no pretende cambiar a nadie y tampoco ser una verdad absoluta, si no que una minúscula parte de ella, ya que cada vez que hablamos mentimos. Tú te preguntarás ¿por qué? La respuesta es muy simple: porque con las palabras no se puede expresar con plenitud una vivencia. Se puede tratar de describir de la mejor manera posible la experiencia, para que la persona que lee o escucha escudriñe dentro de sus recuerdos y pueda interpretar o reconocer de lo que se está hablando.

Un sencillo ejemplo puede ser un beso, la mayoría por no decir todos saben lo que es un beso pero todo cambia cuando se intenta describir qué se siente, qué es o cómo vibra, verás que las palabras no alcanzan, no cubren y si la personas que escucha nunca ha tenido esa vivencia, no entenderá nada.

Por tal motivo, hago referencia que mi punto de vista es mi verdad o parte de ella y cada uno debe hacer su propia verdad, y en la medida en que se puedan observar distintas situaciones o vivencias se tendrá una verdad un poco más completa, incluso si agregamos una mentira ya que tendremos un opuesto y entenderás mejor de qué se trata.

El Juego de los Espejos

Un juego que utiliza mi muy querido Zen y que también es utilizado por diversas tradiciones (como lo señalan los mayas), es precisamente el reconocer qué tienes TÚ de la otra persona que tienes al frente y que estás enjuiciando, discriminando, encasillando.

De nada sirve decir que es bueno o malo, grande o chico, pesado o simpático. Lo importante es darte cuenta de por qué lo reconoces, cómo te das cuenta que es de esa forma, y aquí haré referencia al siguiente koan, ¿Puedes describirme cómo es la casa blanca de 3 pisos ubicada en el cerro El Manquehue, en la Ciudad de Santiago de Chile? No, ¿verdad? Sólo podría hacerlo aquel que la conozca. Lo que sí pueden hacer todos es hablarme de su casa y de aquello que conocen.

¿Te diste cuenta del juego en que caes permanentemente? El notar que una persona es de una manera u otra sólo lo puedes percibir porque tu también actúas de la misma forma y lo conoces. Lo que podría variar es el porcentaje de aquello que estás viendo.

La próxima vez que enjuicies a alguien por el motivo que sea, analiza qué similitudes tiene contigo y en qué te afectan, observaras que estás haciéndolo por ti no por la persona que está al frente y es probable que no le afecte en nada, tu no vas a ganar nada si la enjuicias solo la harás sufrir, lo ideal es que le muestres el error con amor, dulzura, cariño o amabilidad y con esto lograrás reconocerte, aceptarte, enfrentar tus temores, envidias y muchas cosas más.

En la medida que tu reacción sea más fuerte, ello indica que tu bote va muy lleno.

A continuación, te contaré sobre un koan que explica esto del bote vacío, para que puedas entender a qué me refiero:

EL BOTE VACÍO

(El Camino de Chuang Tzu)

“Aquel que gobierna sobre los hombres vive en la confusión.

Aquel que es gobernado por hombres vive en el dolor.

Por tanto, Yao deseaba no influir en los demás ni ser influido por ellos.

El camino para apartarse de la confusión y quedar libre del dolor es vivir en el tao, en la tierra del gran vacío.

Si un hombre está cruzando un río, y un bote vacío choca con su esquife, por muy mal genio que tenga no se enfadará demasiado; pero si ve en el bote a un hombre, le gritará que se aparte.

Si sus gritos no son escuchados, volverá a gritar, una y otra vez, y empezará a maldecir.

Y todo porque hay alguien en el bote.

No obstante, si el bote estuviera vacío, no estaría gritando, ni estaría irritado.

Si uno puede vaciar el propio bote, que cruza el río del mundo, nadie se le opondrá, nadie intentará hacerle daño.

El árbol derecho es el primero en ser talado, el arroyo de aguas claras es el primero en ser agotado.

Si deseas engrandecer tu sabiduría y avergonzar al ignorante, cultiva tu carácter y sé más brillante que los demás, una luz brillará en torno a ti como si te hubieras tragado el Sol y la Luna: no podrás evitar las calamidades.

Un hombre sabio ha dicho:

El éxito es el principio del fracaso. La fama es el comienzo de la desgracia. ¿Quién puede liberarse del éxito y de la fama, descender y perderse entre las masas de los hombres?

Fluirá como el tao, sin ser visto, se moverá con la propia vida sin nombre ni hogar.

Él es simple, sin distinciones.

Según todas las apariencias, es un tonto.

Sus pasos no dejan huella. No tiene poder alguno.

No logra nada, carece de reputación.

Dado que no juzga a nadie, nadie lo juzga.

Así es el hombre perfecto: su bote está vacío.”

Si tu bote va lleno te invito a trabajar en la sabiduría, no es necesario que trabajes en el conocimiento porque está afuera, demorarás toda la vida llenándote de conocimientos y no encontrarás el camino. Trabaja en mirarte a ti mismo, en reconocer tu sabiduría interior.

¿Por qué digo reconocer?, cada uno de nosotros estamos sustentado por un maravilloso ser de luz. Mira detenidamente lo que significa la palabra ESTUDIOS, ES TU DIOS, eso significa sacar aquello que tenemos dentro de Dios. Todo está dentro, todo lo que necesitas para evolucionar está en tu interior, lo que necesitas es tener la conciencia permanente, de cada acción, de cada momento aquí y ahora.

CONCIENCIA CONSTANTE

(El canto del pájaro de Anthony de Mello)

“Ningún alumno Zen se atrevería a enseñar a los demás hasta haber vivido con su Maestro al menos durante diez años. Después de diez años de aprendizaje, Tenno se convirtió en maestro.

Un día fue a visitar a su Maestro Nan-in. Era un día lluvioso, de modo que Tenno llevaba chanclos de madera y portaba un paraguas.

Cuando Tenno llegó, Nan-in le dijo: «Has dejado tus chanclos y tu paraguas a la entrada, ¿no es así?

Pues bien: ¿puedes decirme si has colocado el paraguas a la derecha o a la izquierda de los chanclos?».

Tenno no supo responder y quedó confuso. Se dio cuenta entonces de que no había sido capaz de practicar la Conciencia Constante. De modo que se hizo alumno de Nan-in y estudió otros diez años hasta obtener la Conciencia Constante.

El hombre que es constantemente consciente, el hombre que está totalmente presente en cada momento: ese es el Maestro.”

Si tienes conciencia de todos tus actos, de lo que haces, cómo lo haces, estás en un camino interior que te permitirá reconocerte, enfrentarte contigo mismo y aceptarte. Una vez que hayas realizado este proceso, desaparecerán tus miedos, angustias y dolores. Estando en mejor pie para mirar a los demás y entender sus comportamientos, el por qué hacen las cosas, qué los motiva y saber cuál es la esencia que eleva el ser humano.

Te darás cuenta que son niños de 2 años aprendiendo, creciendo, evolucionando. Cuando un niño de 2 años rompe una lámpara, ¿qué castigo le das? Al cabo de dos minutos, mientras recoges los pedazos para botarlos a la basura, ya se pasó hasta el enojo. Eso es lo que somos, Niños de Luz aprendiendo.

Lo anterior, es la única manera de darte cuenta de cómo son las cosas. Cada uno tiene su conciencia y un ser superior que lo guía, no compren a nadie por tonto, nadie lo es.

El Crimen y el Castigo

El profeta

Autor Gibran Khalil Gibran

“Cuando solitario y sin amparo cometes una falta para con los demás, la cometes también para contigo.

El dios de vuestro yo es como el mar: desconoce los túneles del topo y los hoyos de la serpiente.

Pero el dios de vuestro yo no vive solamente en vosotros.

Aunque mucho en vosotros es todavía hombre, mucho en vosotros no lo es todavía: no es sino una forma confusa que, sonámbula en la niebla, busca su despertar.

Y es del hombre que hay en vosotros de quien deseo hablar.

Porque es ese hombre, y no el dios de vuestro yo, ni la forma confusa que se mueve en la niebla, quien conoce el crimen y el castigo.

Frecuentemente habláis de quien comete una falta como de un extraño, un intruso y no uno de vosotros.

Pero lo más sublime y lo más bajo está en cada uno de vosotros.

Y quien comete una falta no puede hacerlo sin la tácita voluntad de todos.

Juntos marcháis, él y vosotros, hacia el dios de vuestro yo.

Y sois el camino, y sois los caminantes.

Y cuando cae uno de vosotros, cae para quienes van tras él no tropiecen con el mismo obstáculo. Y cae también por quienes le precedieron, aquellos que, más firmes y veloces, no apartaron, sin embargo, el obstáculo.

El justo y el bondadoso no son inocentes de cuanto hacen el injusto y el malvado.

Porque están juntos a la luz del sol, como lo están el hilo blanco y el hilo negro en la trama del tejido.

Y si uno de ambos hilos se corta, por fuerza el tejedor revisará toda la tela y también el telar.

Quien lleve a juicio a la mujer infiel, ponga también el corazón de su marido en la balanza y pese la verdad de su espíritu.

Quien deba castigar al ofensor, examine también el alma del ofendido.

Y quien en nombre de la justicia castigue abatiendo su hacha sobre el tronco malo, recuerde también sus raíces.

Descubrirá las raíces de lo bueno y lo malo, lo fértil y lo yermo, inseparablemente unidos en el callado corazón de la tierra.

Vosotros, magistrados, que tenéis el deber de ser justos:

¿Qué juicio emitirías acerca del que, honesto en su conducta, es deshonesto en su espíritu?

¿Qué pena impondrías al que en sus actos es opresor y falso, y, no obstante, es también oprimido y engañado?

¿Cómo castigaríais a aquel cuyo remordimiento es mayor que su falta?

¿Acaso no es el remordimiento la justicia de esa ley a la que queréis servir?

No podréis, empero, llenar de remordimiento al inocente ni aligerar de su remordimiento al culpable.

El remordimiento llega sin ser llamado, en medio de la noche, para que los hombres despierten y cada uno mire su propio corazón.

Y vosotros, legisladores, qué pretendéis decidir qué es justo y qué injusto, ¿cómo lo lograréis si no observáis todos los hechos a plena luz?

Únicamente así sabréis que el erguido y el caído son un solo hombre de pie sobre un ocaso, entre la noche de su confuso yo y el día de su dios interior.

Y sabréis asimismo que la torre del templo no es más alta que el más profundamente hundido de sus cimientos.”¿

Cuando Jesús exhortó a “el que estuviera libre de pecado lanzara la primera piedra”, lo que estaba indicando precisamente era que mirasen en su interior y tomaran conciencia de sus actos, como también ver qué había de ellos en esa mujer que estaba pronta a ser castigada y lapidada.

Si revisas bien te darás cuenta que todo aquel que levanta una piedra es para protegerse de sus temores, por su egoísmo. Los siguientes simples ejemplos lo explican:

Cuando estás en la cola del banco esperando el turno y alguien te adelanta, se reclama la gran falta de respeto HACIA LOS DEMÁS, es ahí donde te darás cuenta de lo hipócritas que somos. Estamos reclamando por nosotros, porque nos hemos sentido pasados a llevar.

Otro ejemplo claro de esto, es cuando vas a un funeral y lloras por el muerto. ¿Por quién estás llorando realmente? O cuando compras un regalo a un amigo que está de cumpleaños, esperas que lo abra, le agrade el obsequio y por supuesto que lo haga saber.

Sé que muchos dirán “tú estás equivocado, esto no es así”, los escucho y muy claro. Sal del prejuicio y mira qué posibilidad habría, por remota que fuese, que en alguna parte hubiese algo de esto. Hazlo, estás sólo leyendo esto y puedes ser honesto contigo mismo.

Aprende a aprender, descubre qué te puede aportar la persona que tienes al frente, descubre las verdades del otro, mira con ojos de niño, aprendiendo sin juzgar de antemano. No juzgues, recuerda que todo el mundo desea hacer las cosas bien, sólo que puede hacer lo que su conciencia y su evolución le permite en ese momento.

Cada día es diferente, disfruta este camino de mirarte, de conocerte y elevarte, en cada conciencia de tu respiración, ya que estás vivo.

¡Puedo Cortar Madera!

(El canto del pájaro de Anthony de Mello)

“Cuando el Maestro zen alcanzó la iluminación, escribió lo siguiente para celebrarlo:

“¡Oh, prodigio maravilloso: puedo cortar madera y sacar agua del pozo!”

Trillones de Bendiciones